IGLESIAS QUE MUEREN II
Cinco señales de una iglesia muriendo
Por Tim Spivey
Traducido por Dr. Daniel Guerrero
Hay una diferencia en que su iglesia :
Sea pequeña y moribunda.
Estancada y muerta.
Disminuyendo y muriendo.
Fusionada y muerta.
Sea grande y saludable.
Sea grande y alcance a los perdidos.
A ser grande y tenga un largo futuro.
La verdad es que, para una iglesia, morir es sólo eso: morir.
Sin embargo, también es cierto que, hay síntomas que indican que una iglesia puede estar en el camino hacia la muerte. Un mal diagnóstico del "estado actual de la unión" y cuáles sean los verdaderos problemas, es una empresa resbaladiza.
Sin embargo, hablando en general, aquí hay cinco señales que podrían indicarle que su iglesia está empezando a morir :
1 . El liderazgo está paralizado.
Si el liderazgo está irremediablemente fracturado y no existe un plan real para solucionar este problema, esa podría ser una clara señal de que su iglesia está empezando a morir...
Si nadie se ha comprometido a renunciar y el liderazgo no puede o no quiere corregirse a sí mismo mediante la eliminación de alguien de sus filas, sea que estén de acuerdo o en desacuerdo, eso podría ser una dirección peligrosa para la vida de su iglesia.
2 . No hay crecimiento real en los últimos cinco años.
¿Qué quiero decir con "real ": es un año en el que la asistencia creció al menos un 10 por ciento.
A menos que estén en un contexto rural, esto significa que ya no están llegando a las personas con el Evangelio; o que está perdiendo más gente de lo que están llegando y lo han estado haciendo durante cinco años... Este es un buen momento para reconocer que puede haber un problema; y que se requiere orar y trabajar para encontrar soluciones reales.
3 . Su visión está en el espejo retrovisor, no en el parabrisas.
Yo lo llamo "visión de retrovisor": Cuando sale una visión, se piensa más en un retorno al pasado, en vez de avanzar hacia un nuevo futuro.
Esto suele ocurrir porque el dolor causado y recibido por moverse hacia adelante ha sido sustancial y el liderazgo, de manera inconsciente, preferirá volver al pasado; algo en lo cual ellos piensan que todos están de acuerdo. Es también el resultado de pensar que si funcionaba antes, entonces todo funcionará también ahora.
Otro síntoma de "visión de retrovisor" es la constante consideración de qué va a pensar la congregación, como algo superior a cómo podemos llegar mejor con el Evangelio a más gente nueva. Una iglesia necesita hacer eso de vez en cuando, pero si ese es vuestro estilo de vida, ustedes ya tienen "visión de retrovisor."
4 . Han perdido la capacidad de atraer personal de calidad.
En general, las iglesias más pequeñas, que no crecen, valoran a su personal muy poco (en lo mínimo). Esto se une con las partes menos atractivas de la iglesia, que evitan que estas iglesias atraigan a gente de calidad, a quienes Dios ha dotado para el ministerio.
A uno de los mejores entrenadores que conozco se le preguntó ¿qué necesitaría un entrenador con un equipo malo para cambiar las cosas? --Él respondió: "Grandes jugadores."
Todo el mundo se echó a reír. Luego dijo: --"¿O un equipo bien entrenado con buenos jugadores lo hará."
Subestimar y maltratar al personal es común entre las iglesias moribundas. Las iglesias que tienen un personal de calidad, que están en libertad para servir al Señor, rara vez se encuentran en este lugar, si el equipo de liderazgo es saludable.
5 . Dios se manifiesta buscando el candelabro de su iglesia.
Muchas veces pensamos que Dios quiere que nuestra iglesia continúe para siempre, y en casos donde la poca apertura a la agenda de Dios para Su iglesia se ha atrofiado por falta de acción, Él puede enviarles una notificación diciendo que sus días están contados [Ap. 2:5].
En mi experiencia, esto sucede cuando las iglesias no han hecho caso a Su voluntad durante años. No es algo que sucede después de un error; generalmente toma, por lo menos, una década.
Antes que su iglesia tenga, literalmente, que cerrar sus puertas sin una agenda real, Dios suele ofrecer por lo menos una oportunidad de renacer a través de la fusión, disolución o unión a otra iglesia, o la re-plantación [comenzar de nuevo]. Asegúrese que sea de Dios, pero no pasen por ellos por causa del orgullo.
Piensen en el Reino. He visto iglesias cuyos mejores días están por delante de ellos y cambian su ciudad para siempre a través de sabiduría, aún la etapa de la muerte.
Una última cosa:
No tengan miedo de iniciar conversaciones con iglesias que ustedes crean que pueden estar interesadas en una asociación. Busque iglesias flexibles con un ADN teológico similar; que también estén creciendo, que tengan un liderazgo sano y personal de calidad.
Fuente: 5 signs of a dying church
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Fusionada y muerta.
Sea grande y saludable.
Sea grande y alcance a los perdidos.
A ser grande y tenga un largo futuro.
La verdad es que, para una iglesia, morir es sólo eso: morir.
Sin embargo, también es cierto que, hay síntomas que indican que una iglesia puede estar en el camino hacia la muerte. Un mal diagnóstico del "estado actual de la unión" y cuáles sean los verdaderos problemas, es una empresa resbaladiza.
Sin embargo, hablando en general, aquí hay cinco señales que podrían indicarle que su iglesia está empezando a morir :
1 . El liderazgo está paralizado.
Si el liderazgo está irremediablemente fracturado y no existe un plan real para solucionar este problema, esa podría ser una clara señal de que su iglesia está empezando a morir...
Si nadie se ha comprometido a renunciar y el liderazgo no puede o no quiere corregirse a sí mismo mediante la eliminación de alguien de sus filas, sea que estén de acuerdo o en desacuerdo, eso podría ser una dirección peligrosa para la vida de su iglesia.
2 . No hay crecimiento real en los últimos cinco años.
¿Qué quiero decir con "real ": es un año en el que la asistencia creció al menos un 10 por ciento.
A menos que estén en un contexto rural, esto significa que ya no están llegando a las personas con el Evangelio; o que está perdiendo más gente de lo que están llegando y lo han estado haciendo durante cinco años... Este es un buen momento para reconocer que puede haber un problema; y que se requiere orar y trabajar para encontrar soluciones reales.
3 . Su visión está en el espejo retrovisor, no en el parabrisas.
Yo lo llamo "visión de retrovisor": Cuando sale una visión, se piensa más en un retorno al pasado, en vez de avanzar hacia un nuevo futuro.
Esto suele ocurrir porque el dolor causado y recibido por moverse hacia adelante ha sido sustancial y el liderazgo, de manera inconsciente, preferirá volver al pasado; algo en lo cual ellos piensan que todos están de acuerdo. Es también el resultado de pensar que si funcionaba antes, entonces todo funcionará también ahora.
Otro síntoma de "visión de retrovisor" es la constante consideración de qué va a pensar la congregación, como algo superior a cómo podemos llegar mejor con el Evangelio a más gente nueva. Una iglesia necesita hacer eso de vez en cuando, pero si ese es vuestro estilo de vida, ustedes ya tienen "visión de retrovisor."
4 . Han perdido la capacidad de atraer personal de calidad.
En general, las iglesias más pequeñas, que no crecen, valoran a su personal muy poco (en lo mínimo). Esto se une con las partes menos atractivas de la iglesia, que evitan que estas iglesias atraigan a gente de calidad, a quienes Dios ha dotado para el ministerio.
A uno de los mejores entrenadores que conozco se le preguntó ¿qué necesitaría un entrenador con un equipo malo para cambiar las cosas? --Él respondió: "Grandes jugadores."
Todo el mundo se echó a reír. Luego dijo: --"¿O un equipo bien entrenado con buenos jugadores lo hará."
Subestimar y maltratar al personal es común entre las iglesias moribundas. Las iglesias que tienen un personal de calidad, que están en libertad para servir al Señor, rara vez se encuentran en este lugar, si el equipo de liderazgo es saludable.
5 . Dios se manifiesta buscando el candelabro de su iglesia.
Muchas veces pensamos que Dios quiere que nuestra iglesia continúe para siempre, y en casos donde la poca apertura a la agenda de Dios para Su iglesia se ha atrofiado por falta de acción, Él puede enviarles una notificación diciendo que sus días están contados [Ap. 2:5].
En mi experiencia, esto sucede cuando las iglesias no han hecho caso a Su voluntad durante años. No es algo que sucede después de un error; generalmente toma, por lo menos, una década.
Antes que su iglesia tenga, literalmente, que cerrar sus puertas sin una agenda real, Dios suele ofrecer por lo menos una oportunidad de renacer a través de la fusión, disolución o unión a otra iglesia, o la re-plantación [comenzar de nuevo]. Asegúrese que sea de Dios, pero no pasen por ellos por causa del orgullo.
Piensen en el Reino. He visto iglesias cuyos mejores días están por delante de ellos y cambian su ciudad para siempre a través de sabiduría, aún la etapa de la muerte.
Una última cosa:
No tengan miedo de iniciar conversaciones con iglesias que ustedes crean que pueden estar interesadas en una asociación. Busque iglesias flexibles con un ADN teológico similar; que también estén creciendo, que tengan un liderazgo sano y personal de calidad.
Fuente: 5 signs of a dying church
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