El Significado de la Fiesta de la Pascua
Dios operó un proceso de liberación primeramente en Su pueblo, para que luego pudiera experimentar toda la liberación socio-económica y política que Él les tenía preparado:
Dios necesitaba liberar primeramente el espíritu, la mente y el alma de Su pueblo, para que luego su fe y obediencia pudiera permanecer con el tiempo:
Cuando el pueblo estuvo listo, entonces Dios los liberó de la esclavitud política y socio-económica, representada por el gobierno egipcio; y los israelitas estaban listos para iniciar el proceso que los conduciría a un nuevo tiempo y a una nueva tierra de libertad.
Y por otro lado, en la proclamación del Evangelio, algunos enfatizan solamente la liberación espiritual, basada en el perdón de los pecados; pero ignoran la liberación espiritual que muchas personas requieren de toda obra de las tinieblas, de toda opresión demoníaca, de enfermedades y maldiciones ancestrales. Se entrega solamente un mensaje de liberación espiritual futurista, escapista, que nada tiene que ver con las luchas mentales, emocionales y sociales que muchas personas, comunidades, ciudades y naciones experimentan hoy. Ese no es el Evangelio del reino de Dios que viene a liberarnos de toda operación y manifestación del reino de la muerte y de las tinieblas.
La Pascua fue el medio de preparación, mediante el cual el pueblo de Dios estaría preparado para salir de la esclavitud a la tierra de libertad y bendición que Dios le había prometido a Abraham, a Isaac y a Jacob.
Por apóstol Daniel Guerrero
La Fiesta de la Pascua es la celebración de la liberación de todo tipo de opresión o esclavitud, sea esta espiritual, mental, emocional o física, y aún social. El primer registro de su celebración se encuentra en el libro de Éxodo capítulo 12, cuando después de nueve (9) plagas, Dios ordena a Su pueblo a prepararse para su salida de la esclavitud de Egipto.
La palabra "Pascua" viene de la palabra hebrea "Pésaj" (pésakj 6453), cuya raíz es la palabra "pasáj (pasákj 6452), que significa: 'saltar encima, pasar por encima, cojear'; que alude a la promesa de Dios que el ángel del Señor no heriría de muerte a toda casa de familia, que hubiera aplicado la sangre del cordero esa noche (Éx. 12:12-14).
Veamos los significados y principios que podemos extraer de la celebración de esta Fiesta:
LA PREPARACIÓN
El Señor, como suele suceder cuándo Él quiere hacer algo, dio instrucciones específicas sobre cómo debían prepararse y preparar la cena para esa noche. Y ya de por sí este es un punto muy importante, la preparación; pues cada vez que Dios guía a su pueblo a la batalla, para vencer a sus enemigos, Él envía a sus siervos los profetas, para dar instrucciones específicas para su preparación, así como para enfrentar al enemigo y derrotarlo.
Veamos las instrucciones del Señor (Éxodo 12:1-28):
1. Les dio un nuevo tiempo, un nuevo calendario, iniciando así un nuevo día, mes y año en la historia del pueblo de Dios (vv.2-6). Así, esta Fiesta debe celebrarse cada año, el día catorce (14) del mes de Nisán o Abib (en luna llena, que representa plenitud o cumplimiento).
2. Les dio un sacrificio específico: un macho de oveja o cabra, de un año, sin defecto (v. 5).
3. El sacrificio debían prepararlo de la siguiente manera: degollarlo y sacarle toda la sangre (vv. 21-22); comer asada con fuego su carne (no hervida ni cruda); no debían quebrarle ningún hueso; y lo restante (junto con sus entrañas) debían quemarlo completamente antes del amanecer (vv. 8-10).
4. La sangre escurrida del sacrificio debía ser guardada en una vasija y ser rociada en los dinteles de la puerta de cada casa, tanto arriba como a los lados (vv. 7,22-23). Esa sangre del cordero de Pascua serviría como señal para el ángel del Señor, para que no hiriera la casa así marcada.
5. Debían comer esta cena deprisa, vestidos como para salir, con sus sandalias puestas y un bastón a la mano. Y toda la comunidad israelita debía participar de la pascua (vv. 11, 43-47).
6. El pan para esta cena debía ser sin levadura; y luego durante seis días, debían comer solamente panes sin levadura y quitar toda levadura de sus casas durante esos días (vv.15-20).
7. El otro acompañante para esta cena eran las hierbas verdes y amargas (v. 8).
8. No se especifica el consumo de vino o bebida basada en el fruto de la vid (mosto o vino joven), pero así solía hacerse en cenas especiales y ceremoniales. Y eso se ve claramente, para los tiempos de Jesús y los apóstoles (Mt. 26:27-29; Mr. 14:23-24; Lc. 22:17-20)
Por todos estos detalles en esta ocasión, así como en otras, es claro el primer significado y principio extraído aquí: Dios desea que Su pueblo esté preparado para Su visitación o Su intervención poderosa a favor de Su pueblo.
LA SANTIFICACIÓN
El segundo significado que resalta en la celebración de esta Fiesta es el deseo de Dios de santificar a Su pueblo, pero que también Su pueblo se santifique para Él, Su Dios, Su libertador, Su salvador. Este significado lo podemos observar en dos aspectos de la celebración de esta Fiesta:
1. El uso de la sangre del cordero o sacrificio de la Pascua como señal distintiva de los que habían creído a las instrucciones que Dios le dio a Su siervo Moisés. La señal de la sangre en los dinteles de las puertas de las casas de los israelitas, era la señal que separaba a los creyentes, al pueblo escogido por Dios, de los egipcios y extranjeros que moraban en esa tierra (Éx. 12:12-13).
2. El uso de panes sin levadura igualmente como una ilustración de la purificación y santificación que deben experimentar todos aquellos que serán liberados (Éx. 12:17-20). El Señor Jesucristo también usó muchas veces el símbolo de la levadura, para significar aquellos pensamientos o patrones de pensamientos que contaminan nuestra forma de pensar, decidir y actuar contrarios a Su voluntad. Él habló de por lo menos de tres tipos de levaduras que debemos evitar o cuidarnos de no contaminarnos: 1. la levadura de los fariseos (pensamientos y conductas religiosas, hipócritas); 2. la levadura de los escribas y saduceos (pensamientos incrédulos y declaraciones eminentemente racionales y legalistas, que anulan, suprimen o cuestionan las obras sobrenaturales de Dios); 3. la levadura de Herodes (pensamientos y conductas que nos conducen a "asesinar" a nuestro hermano; acciones que buscan limitar, entorpecer o dañar la vida y desarrollo de nuestro prójimo, a fin de lograr nuestros propios intereses, pasiones y deseos)
Este otro significado nos da otro principio que debemos prestar atención, previo a Su liberación y redención, Dios desea que Su pueblo se purifique, que se santifique, para Su santa visitación, de manera que Su gloria, justicia y juicios desplegados no se vuelvan contra ellos (Éx. 19:10-17). Por eso, para toda batalla o proceso de lucha espiritual, Él siempre exige a Su pueblo que previamente se santifique y prepare para la ocasión.
LA REDENCIÓN
Quizás este sea el significado más conocido, al que se le ha dado más énfasis en el mundo cristiano, la redención que ocurrió aquella primera Pascua. La redención se realizaba cuando se pagaba el debido precio por una persona que era esclava de otra, sea para su propio uso o para liberarla completamente de la esclavitud. En este caso, el precio que Dios puso para la redención del pueblo de Israel fue el primogénito de toda familia y de todo animal que vivía en Egipto; pero en el caso de Su pueblo, Dios le dio el medio para sustituir la vida de cada primogénito en medio de ellos: el sacrificio y la sangre de un cordero o cabrito de un año. Al ellos obedecer las instrucciones del Señor, "redimían o pagaban" por la muerte de cada primogénito de sus familias y rebaños; y el ángel del Señor "pasaría por encima" de toda casa que tuviera la señal del sacrificio hecho.
"Pues yo pasaré aquella noche por la tierra de Egipto, y heriré a todo primogénito en la tierra de Egipto, así de los hombres como de las bestias; y ejecutaré mis juicios en todos los dioses de Egipto. Yo Jehová. Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto" (Éx. 12:12-13).
Así pues, este tercer significado y principio es también muy importante, para los actos salvíficos de Dios, es necesario pagar un precio por nuestra redención de toda esclavitud y nuestra salvación de todo juicio de Dios. En nuestro caso, en nuestro tiempo, Dios ha provisto en Jesucristo el precio para nuestra redención: el sacrificio y la sangre de Su Hijo, Su único y primogénito Hijo. Y Él sabiendo el significado de esta Fiesta y en sujeción al tiempo de Dios, ejecutó este acto de redención, exactamente durante la celebración de la Fiesta de la Pascua y los Panes sin levadura de su época (Mt. 26:17-19, 26-29; Mr. 14:12-25; Lc. 22:7-19)
LA LIBERACIÓN
Otro significado que nos da la Fiesta de la Pascua es la liberación de todo tipo de esclavitud, sea ésta espiritual, mental, emocional, física o socio-económica. Recordemos que en el relato que estamos estudiando Dios había ordenado la liberación de los israelitas de la esclavitud a la habían estado sometido bajo el gobierno egipcio, para lo cual llamó a Su siervo Moisés:
"Dijo luego Jehová: Bien he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído su clamor a causa de sus exactores; pues he conocido sus angustias, y he descendido para librarlos de mano de los egipcios y sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y ancha, a tierra que fluye leche y miel... Ven, por tanto, ahora, y te enviaré a Faraón, para que saques de Egipto a mi pueblo, los hijos de Israel" (Éx. 3:7-10).
Dios operó un proceso de liberación primeramente en Su pueblo, para que luego pudiera experimentar toda la liberación socio-económica y política que Él les tenía preparado:
1. Liberación mental: de pensamientos tales como: "no podremos", "somos pobres y oprimidos"
2. Liberación emocional: de pensamientos de rechazo, abandono, maltrato, rencor y resentimiento.
3. Liberación física: de debilidad, pesadez, presión o estrés, enfermedad y muerte.
4. Liberación espiritual: de pensamientos de duda, incredulidad, mentira y engaño.
Dios necesitaba liberar primeramente el espíritu, la mente y el alma de Su pueblo, para que luego su fe y obediencia pudiera permanecer con el tiempo:
"Jehová dijo a Moisés: Entra a la presencia de Faraón; porque yo he endurecido su corazón, y el corazón de sus siervos, para mostrar entre ellos estas mis señales, y para que cuentes a tus hijos y a tus nietos las cosas que yo hice en Egipto, y mis señales que hice entre ellos; para que sepáis que yo soy Jehová" (Éx. 10:1-2).
Cuando el pueblo estuvo listo, entonces Dios los liberó de la esclavitud política y socio-económica, representada por el gobierno egipcio; y los israelitas estaban listos para iniciar el proceso que los conduciría a un nuevo tiempo y a una nueva tierra de libertad.
Por lo tanto, podemos ver que la Pascua representa la liberación integral (en todas las áreas de la vida humana), que Dios opera en la vida de las personas, y aún comunidades (pueblos, ciudades y naciones), para que experimenten todo el bien y las promesas que Dios le ha dado a Su pueblo. Lamentablemente, se ha hecho un énfasis desmedido solamente al aspecto de la liberación espiritual, y se nos olvida que Dios también está interesado en liberarnos de todo tipo de esclavitud, sea mental, emocional, física y aún política y socio-económica.
La historia narra, para nuestra vergüenza, cómo líderes y naciones "cristianas" esclavizaron, oprimieron y explotaron a pueblos y naciones, y aún traficaron e hicieron comercio con las vidas de muchas personas y de pueblos enteros. La esclavitud humana, ejecutada por personas y naciones "cristianas" es una total y abierta contradicción al mensaje del Evangelio del reino de Dios, cuyo fundamento es la Fiesta de la Pascua.
Y por otro lado, en la proclamación del Evangelio, algunos enfatizan solamente la liberación espiritual, basada en el perdón de los pecados; pero ignoran la liberación espiritual que muchas personas requieren de toda obra de las tinieblas, de toda opresión demoníaca, de enfermedades y maldiciones ancestrales. Se entrega solamente un mensaje de liberación espiritual futurista, escapista, que nada tiene que ver con las luchas mentales, emocionales y sociales que muchas personas, comunidades, ciudades y naciones experimentan hoy. Ese no es el Evangelio del reino de Dios que viene a liberarnos de toda operación y manifestación del reino de la muerte y de las tinieblas.
LA SALVACIÓN
Y por último, ¡la Pascua significa salvación! El pueblo del Señor es salvado de los juicios de Dios contra el sistema opresor y esclavizante del mundo, representado por el gobierno del Faraón en Egipto; para trasladarnos a una mejor vida, representada por la "tierra prometida". Este mensaje fue el que Dios quiso que los padres israelitas le contaran a su descendencia:
"Porque Jehová pasará hiriendo a los egipcios; y cuando vea la sangre en el dintel y en los postes, pasará Jehová aquella puerta, y no dejará entrar al heridor en vuestras casas para herir. Guardaréis esto por estatuto para vosotros y para vuestros hijos para siempre. Y cuando entréis a la tierra que Jehová os dará, como prometió, guardaréis este rito. Y cuando os dijeren vuestros hijos: ¿Qué es este rito vuestro?, vosotros responderéis: es la victima de la pascua de Jehová, el cual pasó por encima de las casas de los hijos de Israel, y libró nuestras casas" (Éx. 12:23-25).
La Pascua fue el medio de preparación, mediante el cual el pueblo de Dios estaría preparado para salir de la esclavitud a la tierra de libertad y bendición que Dios le había prometido a Abraham, a Isaac y a Jacob.
Se observa entonces, que la salvación de Dios tiene una triple acción:
1. Ser purificados, mediante el sacrificio y la sangre del cordero de Pascua.
2. Ser liberados, de la opresión del Faraón y Egipto por una parte; y de los juicios de Dios por otra.
3. Ser trasladados a la tierra prometida, que en este caso representa el reposo de Dios
Aquellos que no cumplieran los dos primeros pasos, establecidos en las instrucciones que Dios entregó a través de Su siervo Moisés, no podrían disfrutar la tercera acción salvífica. Tenemos que entender que la salvación de Dios implica estas tres acciones; no una, no dos, sino las tres.
CONCLUSIÓN
En el Nuevo Testamento, los apóstoles nos enseñan que Jesucristo es nuestra Pascua. Su sacrificio ya fue hecho, pero se requiere de nosotros que sigamos, continuamente, quitando toda vieja levadura, de manera que seamos una nueva masa limpia y santa para Dios, "de sinceridad y verdad" (1Cor. 5:7-8).
Jesús no eliminó la Fiesta de la Pascua, de hecho Él está esperando para celebrarla con todos nosotros, en su Segunda venida (Mt. 26:29; Mr. 14:25; Lc. 22:15-18). Él le dio un nuevo contenido, porque estableció un NUEVO Pacto, mediante el cual ya no es necesario esforzarse en cumplir la ley de Moisés; sino creer y aceptar la justicia que Jesucristo cumplió por nosotros, en nuestro lugar (Ro. 3:9-26). Jesús dijo sobre los elementos de la Pascua (Lc. 22:19-20):
1. Este pan (pan sin levadura), "es mi cuerpo que por ustedes es partido", sacrificado.
2. Esta copa, es mi sangre, "la copa del nuevo pacto en mi sangre", para el perdón de los pecados.
El apóstol Pablo confirma el significado de estos símbolos en su primera carta a la iglesia en Corintos (1Cor. 11:24-26).
Dios, en este tiempo, desea que todo aquel que escucha el mensaje del Evangelio de Jesucristo, reciba el sacrificio que Jesucristo, el cordero de Dios, hizo en la cruz del Calvario. Él quiere rociar con Su sangre, ya no la puerta de tu casa; sino la puerta y el interior de tu corazón. Él declaró:
"Yo soy el pan de vida, el que a mi viene nunca tendrá hambre; y el que en mi cree, no tendrá sed jamás... De cierto, de cierto os digo: El que cree en mi, tiene vida eterna. Yo soy el pan de vida" (Jn. 6:35, 47-48).
Y sigue invitando a todos aquellos que creen en Él a cenar una cena pascual de comunión junto con Él:
"He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo" (Ap. 3:20).
Y sigue invitando a todos aquellos que creen en Él a cenar una cena pascual de comunión junto con Él:
"He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo" (Ap. 3:20).
¡Ven a Jesús y celebra un nuevo tiempo de salvación, que afectará cada área en tu vida!
¡Celebra un nuevo tiempo de victoria en esta Fiesta de la Pascua!
¡Que el poder y todo el significado de la Fiesta de la Pascua sea una realidad en tu vida!
Bendiciones
20 comentarios:
Esta noche, tendré abierta la puerta de mi casa, se que el Señor me acompañara en la cena de Pascua.- Bien venido sea.
Gracias a este escrito pude entender la fiesta de la pascua. Esta fiesta no es cualquier cosa... Hay que tomarle mucha importancia.
buen mensaje. gracias al Señor.
En la Comunidad cristiana Hay paz con Dios nos gozamos en poder ser de bendición para sus vidas y ministerios.
Que el Señor les siga bendiciendo mucho!
Disculpe soy nueva en su pagina y apenas enpese a leer la biblia nose mucho pero por dios estoy dispuesta asaver y tengo dos preguntas. Cuando comienza el dia del pan sin levadura? Y es lo mismo el dia de pascua con el las fiesta del pan sin levadura?
Muy buena enseñanza. Bendiciones
que bella reflexiòn puede hacer cada persona luego de esta lectura tan clara y amena.Bendiciones para el autor o autores de la misma.
Venezuela 27/Marzo de 2016, 11,23 am
excelente explicacion, nunca la habia entendido como ahora, bendiciones
excelente explicacion, nunca la habia entendido como ahora, bendiciones
excelente explicacion, nunca la habia entendido como ahora, bendiciones
excelente explicacion, nunca la habia entendido como ahora, bendiciones
excelente explicacion, nunca la habia entendido como ahora, bendiciones
Espero que se haya acercado a DIOS como el desea que se le acerque, DIOS lo bendiga
Dios les bendiga
Excelente !!! Aprendemos pues, que la pascua nos invita a prepararnos y a santificarnos, reconocimiento en Jesucristo la redención de nuestros pecados, la liberación de nuestras esclavitud es y la oportunidad de ser salvos.
Examinemonos pues, y no perdamos ésta oportunidad, pues nuestra oportunidad es CRISTO. BENDICIONES
Excelente !!! Aprendemos pues, que la pascua nos invita a prepararnos y a santificarnos, reconocimiento en Jesucristo la redención de nuestros pecados, la liberación de nuestras esclavitud es y la oportunidad de ser salvos.
Examinemonos pues, y no perdamos ésta oportunidad, pues nuestra oportunidad es CRISTO. BENDICIONES
También puedes escuchar sermones acerca de la pascua aquí:
http://www.oyehermano.com/2018/04/05-lecciones-sobre-la-pascua.html
Me gustó mucho el comentario, que Dios les bendiga y les dé más luz.
R..-
Así como el pueblo comió esa noche apresuradamente, hoy en tiempos oscuros, usted y yo rápidamente para comer y participar del verdadero pan del cielo, porque el tiempo ya es cumplido de estar pronto en la nueva vida... un abrazo y no dejemos para mañana lo que nos pide hoy el Señor.
R..-
Dios le pagué por dar de gracia lo que de gracia ha recibido
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