HABLAR EN LENGUAS HOY
ARTÍCULOS RELACIONADOS:
Lenguas extrañas entre los No-Pentecostales
Por pastor Lic. Pablo Ortega
Mi Búsqueda
En estas líneas quiero compartir mi experiencia con el lenguaje espiritual (lenguas) y las bases bíblicas para sostener que está vigente, así como una reflexión de su vigencia a lo largo de la historia de la iglesia.
En estas líneas quiero compartir mi experiencia con el lenguaje espiritual (lenguas) y las bases bíblicas para sostener que está vigente, así como una reflexión de su vigencia a lo largo de la historia de la iglesia.
Lo interesante de lo que quiero compartir contigo, es que nací de nuevo en una iglesia que piensa que las lenguas no están vigentes en nuestro tiempo. Uno de mis pastores, inclusive me compartió sus frustraciones con un grupo de diáconos de su antigua iglesia, porque ellos habían simulado el hablar en lenguas y un día lo confesaron. Sin embargo, hoy día, Dios me ha regalado la bendición de poder orar en otras lenguas, o llamado por algunos: lenguas extrañas o lenguaje espiritual. Un don que te permite orar e interceder directamente al padre conforme a la voluntad de Dios. Yo oro para que tú puedas recibir la misma bendición en este tiempo. Y puedas aumentar tu efectividad en el Reino de Dios.
Doy gracias a Dios, porque un anciano de la iglesia donde nací en Cristo, el hermano Guerrero, antes de morir, hace aproximadamente 30 años, me regaló un libro sobre las lenguas. No lo leí, sino después de su muerte. Allí comenzó un largo camino de avances y retrocesos en mi búsqueda de poder experimentar este don. Como maestro de la palabra, conozco todos los argumentos de quienes habla en contra de la vigencia de las lenguas. No voy a hablarles de sus argumentos. Prefiero decirte que durante años luché entre buscar y pedir al Señor Jesús ese don y no creerlo. Experimenté muchas frustraciones, leía libros de mis hermanos pentecostales y seguía las instrucciones dadas por ellos en sus libros y nada sucedía. Simplemente, no pasaba nada. Pero Dios me hizo acucioso, no me gusta conformarme con argumentos huecos y vanos. Por ello, mi tesis para graduarme de licenciado en Teología, fue titulada “La vigencia de los dones espirituales a lo largo de la historia”, esto me permitió conocer que era falso que las lenguas hubieran cesado con los apóstoles y la iglesia primitiva. Hay muchas evidencias históricas que muestran a muchos hombres y mujeres que experimentaron la bendición de poder orar en otras lenguas.
Pasaron muchos años y un día estando ya entre los “Hermanos en Cristo”, en un “Culto Unido” de nuestra organización (creemos que todos los dones están vigentes), mi esposa experimento el hablar en otras lenguas. Sin que nadie le indujera a hacerlo. De hecho no volvió hacerlo, sino hasta que llegamos a los Teques y Dios nos regaló formar una nueva congregación de los Hermanos en Cristo allí. Yo seguía igualito, frustrado sin poder experimentarlo. Muchas veces decía: bueno eso debe ser sólo para unos pocos, pero luego volvía día tras día a revisar los argumentos en contra y en favor del hablar en otras lenguas y seguía orando a Dios por ello.
Mi Experiencia
Fue apenas en Enero del 2014, guiado por Dios a participar en un ayuno de cinco días en la Montaña de Dios, organizado por un grupo de pastores, el MOVIUC (Movimiento de Unidad), que una mañana cuando se oró por quienes queríamos recibir el don de lenguas, por primera vez experimente en mi vida hablar en otras lenguas. Fue como si de mis entrañas con una fuerza tremenda empujaba mi lengua a decir cosas no entendidas por mí. No quería parar. Mientras hablaba en lenguas, oí decirle al Señor Jesús decirme: “te estaba esperando·” y luego volví a oír su voz diciendo: “recibe mi peso de gloria”. Yo sentía todo mi cuerpo muy pesado, de hecho no me podía mover.
Pasaron los días y posterior a esta experiencia, volvieron las luchas en mi mente. Mi mente me decía: “Es posible que tu inconsciente lo creó”, tal vez, alguien pudiera decir con razón: ese pensamiento vino del diablo. Lo cierto es que, en el mes de abril de ese mismo año, tuvimos nuevamente un ayuno de pastores por la unidad de los líderes cristianos en Venezuela. La primera noche, mientras dormía, Dios me dijo en sueño: “Esas lenguas yo te las di”. Al siguiente día, comencé a reflexionar en esas palabras, Dios trajo un rompimiento. Ese fue solo un primer rompimiento con mis estructuras mentales doctrinales, que estaban muy arraigadas en mi corazón. El segundo rompimiento y más crucial, fue una mañana en un ayuno parcial, ya para finalizar, vi un vídeo expositivo exegético sobre el canto profético o canto en otras lenguas, y al final mientras oraba literalmente sentí que de mi salió algo malo. Inmediatamente, Dios me trajo el pensamiento: “has sido liberado de un espíritu que impedía que pudieras hablar libremente en otras lenguas”.
Venía de continuo el pensamiento y la pregunta: ¿pero eso sólo es posible en un momento o yo puedo hablar en lengua cada vez que quiero? Dios nuevamente trajo la respuesta bíblica experiencial. Quiero hacer un paréntesis para decirte, Dios es maravilloso y paciente. Dios es bueno y a quien sinceramente quiere buscarlo lo va a encontrar, porque Dios puede ser hallado Bueno, la respuesta es sí. Es posible. Si tu revisas 1 Corintios 14, sin prejuicios doctrinales, bajo la guía del Espíritu Santo podrás descubrir que las lenguas es un lenguaje espiritual dado por Dios para que podamos orar. Y lo podemos hacer de manera ininterrumpida. He aprendido a orar en lenguas durante mi tiempo de oración privado. Y Dios me ha dicho: “tú puedes orar en lenguas continuamente”.
Cuándo Orar en Lenguas
He encontrado cuatro áreas o maneras en que podemos orar en lenguas:
La primera, las lenguas como un lenguaje de oración. Pablo le dice a los Corintios que el oraba en lenguas más que todos ellos, pero que en la iglesia prefería profetizar para edificar la iglesia. Si Pablo oraba tanto en otras lenguas ¿Cuándo lo hacía? La respuesta es evidente: en su tiempo de oración privada. Lo que sucede es que hemos sometido las lenguas a un espectáculo público, en lugar de verlo como un poderoso ministerio de intercesión en el Espíritu. Pablo dice: yo desearía que todos hablen en lenguas. Se nos dice que yo puedo pedirle al Señor dones y el Espíritu decidir a quién darlos. Quien ora en lenguas, ora en el Espíritu. Al punto, que el Apóstol Pablo sabiamente introduce que en mi tiempo de oración personal debo incluir orar en el Espíritu y orar con el entendimiento. No tenemos que caer en la discusión teológica de si el hablar en lenguas es la manifestación visible de ser bautizado en el Espíritu Santo. Es un don disponible para todos los que lo desean, otorgado por el Espíritu a quienes él quiere darlo.
En nuestra congregación, una iglesia en desarrollo. Donde todas los hijos espirituales que Dios me ha dado no tienen nada que ver con la diatriba teológica en la cual yo crecí. En un taller de activación de dones del Espíritu, lograron vivenciar por primera vez 1 Corintios 14. En la mañana oramos, quienes habíamos recibido el don de lenguas, por quienes lo querían recibir y un grupo de hermanos(as) comenzaron a hablar en otras lenguas. Es verdad, no todos lo experimentaron. Pero días o meses después, quienes oraron pidiendo poder hablar en otras lenguas, lo hicieron. Inclusive un joven convertido a Cristo, después de estar 20 años siendo adoctrinado por los Testigos de Jehová. En una pequeña reunión de oración en una de las casas, comenzó a poder orar en el Espíritu. En el taller de activación de dones del Espíritu, en la tarde, pudimos activar el don de interpretación de lenguas, y algunas personas entre jóvenes y adultos podían experimentar que uno a uno pasara a hablar y algunos pudieran interpretar lo que Dios decía. Construimos una carta del Espíritu para la iglesia donde de manera sorprendente todo lo dicho tenía un hilo de coherencia.
En segundo lugar, las lenguas proféticas. Razón de la confusión de algunos de nuestros hermanos en la fe. La lengua profética es activada por el Espíritu en la reunión pública para edificar a la congregación. Por ello el apóstol Pablo en 1 Corintios 14 dice que debe haber quien interprete ese mensaje en otras lenguas. Y hemos experimentado la diferencia entre una y otra. Un día la pastora Lesbia (mi esposa) se disponía a predicar y sintió en su espíritu que debía hablar en lenguas y luego predicó. Al final del culto supimos que una anciana interpretó el mensaje de Dios. Sólo 15 días después le pedimos que lo hiciera público. Nuestros cultos deberían ser como se describe en 1 Corintios 14, unos traen un salmo, uno trae una exhortación, uno trae profecías, otros trae lenguas proféticas con su interpretación; todo debe ser hecho para edificar a la iglesia de Cristo. Es sencillamente volver al molde original. Los Hermanos en Cristo enfatizamos mucho volver al modelo original, volver a lo que enseño Jesús, a las prácticas de la iglesia primitiva. No somos más santos que otros hermanos porque hablamos en Lenguas. Es la sangre de Cristo que nos hace santos, comprados para Dios, hechos hijos de Dios, herederos con Cristo, que reinaremos con él cuando regrese en gloria.
Ahora bien, en la celebración de los cultos a Dios, Pablo recomienda que si no hay intérprete la persona ore para sí. Entonces yo puedo controlar el hablar en lenguas. Nuestras lenguas no son lenguas demoniacas, en las cuales los demonios toman el control de la persona y en estado estático y no consciente comienza a hablar, la iglesia primitiva también conocía eso. Es necesario el poderoso don de discernimiento de Espíritu, porque en la iglesia de Corinto se habían colado personas que no estaban hablando por el Espíritu Santo y estaban maldiciendo a Cristo. En las religiones paganas de la época, la gente era tomada por los demonios en sus sacrificios y comenzaban a hablar en lenguas dadas por los demonios. Es por ello imprescindible, cubrir en oración continúa a la iglesia, para que no entre en sus filas falsos adoradores. Lo mismo sucede con las profecías o con el don de ciencia (conocimiento), pueden ser confundidos con la acción demoniaca de adivinación. Nuevamente, es el don de discernimiento de espíritus que nos dan la luz roja contra las obras de las tinieblas. Pedro en un instante recibió una revelación del Espíritu y declaró que Jesús era el hijo de Dios y acto seguido recibió un pensamiento de los demonios de impedir que Jesús muriera en la cruz. Jesús no reprendió a Pedro, sino a Satanás que le había dado ese pensamiento.
Una tercera manifestación de las lenguas es como señal a los incrédulos. En primera de Corintios 14 Pablo dice que las lenguas es una señal para los incrédulos. Un hermoso ejemplo de las lenguas como señal lo encontramos en Hechos capítulo 2. Fíjate que allí ellos comienzan a hablar en otras lenguas y hablan las lenguas que entendían los presentes en Jerusalén. Ellos podían entender lo dicho, porque les hablaban en las lenguas maternas de los presentes. El mensaje glorificaba a Dios, exaltaba a Dios. Un evento de testimonio evangelístico. A lo largo del tiempo, misioneros han experimentado eso. Los creyentes galileos no conocían esas lenguas, pero el Espíritu Santo les daba hablar, porque son lenguas evangelísticas, son por señal a los incrédulos.
La cuarta manifestación de las lenguas, son gemidos indecibles. Se encuentra en Romanos 8, allí se nos informa que nosotros no sabemos cómo pedir, pero el Espíritu intercede por nosotros con gemidos indecibles conforme a la voluntad de Dios. Son momentos de oración en los cuales nuestra oración es un gemido que es diferente, tiene una carga emocional por una petición, que claramente tu mente no entiende, pero sabes que el Espíritu Santo está pidiendo por algo.
Conclusión
Hermano, el orar en lenguas extrañas o en otras lenguas o con un lenguaje espiritual, es orar misterios a Dios, tu espíritu es edificado según el Apóstol Pablo. No he escrito esto para debatir, sino buscando alcanzar aquellos ministros que como yo han batallado con el pensamiento de permitirle al Espíritu Santo le conceda el hablar en otras lenguas. Dios está levantando un poderoso movimiento de unidad entre las congregaciones de distintas corrientes. Eso es lo que está haciendo en Venezuela, y en los Teques.
Doy gracias a Dios, porque un anciano de la iglesia donde nací en Cristo, el hermano Guerrero, antes de morir, hace aproximadamente 30 años, me regaló un libro sobre las lenguas. No lo leí, sino después de su muerte. Allí comenzó un largo camino de avances y retrocesos en mi búsqueda de poder experimentar este don. Como maestro de la palabra, conozco todos los argumentos de quienes habla en contra de la vigencia de las lenguas. No voy a hablarles de sus argumentos. Prefiero decirte que durante años luché entre buscar y pedir al Señor Jesús ese don y no creerlo. Experimenté muchas frustraciones, leía libros de mis hermanos pentecostales y seguía las instrucciones dadas por ellos en sus libros y nada sucedía. Simplemente, no pasaba nada. Pero Dios me hizo acucioso, no me gusta conformarme con argumentos huecos y vanos. Por ello, mi tesis para graduarme de licenciado en Teología, fue titulada “La vigencia de los dones espirituales a lo largo de la historia”, esto me permitió conocer que era falso que las lenguas hubieran cesado con los apóstoles y la iglesia primitiva. Hay muchas evidencias históricas que muestran a muchos hombres y mujeres que experimentaron la bendición de poder orar en otras lenguas.
Pasaron muchos años y un día estando ya entre los “Hermanos en Cristo”, en un “Culto Unido” de nuestra organización (creemos que todos los dones están vigentes), mi esposa experimento el hablar en otras lenguas. Sin que nadie le indujera a hacerlo. De hecho no volvió hacerlo, sino hasta que llegamos a los Teques y Dios nos regaló formar una nueva congregación de los Hermanos en Cristo allí. Yo seguía igualito, frustrado sin poder experimentarlo. Muchas veces decía: bueno eso debe ser sólo para unos pocos, pero luego volvía día tras día a revisar los argumentos en contra y en favor del hablar en otras lenguas y seguía orando a Dios por ello.
Mi Experiencia
Fue apenas en Enero del 2014, guiado por Dios a participar en un ayuno de cinco días en la Montaña de Dios, organizado por un grupo de pastores, el MOVIUC (Movimiento de Unidad), que una mañana cuando se oró por quienes queríamos recibir el don de lenguas, por primera vez experimente en mi vida hablar en otras lenguas. Fue como si de mis entrañas con una fuerza tremenda empujaba mi lengua a decir cosas no entendidas por mí. No quería parar. Mientras hablaba en lenguas, oí decirle al Señor Jesús decirme: “te estaba esperando·” y luego volví a oír su voz diciendo: “recibe mi peso de gloria”. Yo sentía todo mi cuerpo muy pesado, de hecho no me podía mover.
Pasaron los días y posterior a esta experiencia, volvieron las luchas en mi mente. Mi mente me decía: “Es posible que tu inconsciente lo creó”, tal vez, alguien pudiera decir con razón: ese pensamiento vino del diablo. Lo cierto es que, en el mes de abril de ese mismo año, tuvimos nuevamente un ayuno de pastores por la unidad de los líderes cristianos en Venezuela. La primera noche, mientras dormía, Dios me dijo en sueño: “Esas lenguas yo te las di”. Al siguiente día, comencé a reflexionar en esas palabras, Dios trajo un rompimiento. Ese fue solo un primer rompimiento con mis estructuras mentales doctrinales, que estaban muy arraigadas en mi corazón. El segundo rompimiento y más crucial, fue una mañana en un ayuno parcial, ya para finalizar, vi un vídeo expositivo exegético sobre el canto profético o canto en otras lenguas, y al final mientras oraba literalmente sentí que de mi salió algo malo. Inmediatamente, Dios me trajo el pensamiento: “has sido liberado de un espíritu que impedía que pudieras hablar libremente en otras lenguas”.
Venía de continuo el pensamiento y la pregunta: ¿pero eso sólo es posible en un momento o yo puedo hablar en lengua cada vez que quiero? Dios nuevamente trajo la respuesta bíblica experiencial. Quiero hacer un paréntesis para decirte, Dios es maravilloso y paciente. Dios es bueno y a quien sinceramente quiere buscarlo lo va a encontrar, porque Dios puede ser hallado Bueno, la respuesta es sí. Es posible. Si tu revisas 1 Corintios 14, sin prejuicios doctrinales, bajo la guía del Espíritu Santo podrás descubrir que las lenguas es un lenguaje espiritual dado por Dios para que podamos orar. Y lo podemos hacer de manera ininterrumpida. He aprendido a orar en lenguas durante mi tiempo de oración privado. Y Dios me ha dicho: “tú puedes orar en lenguas continuamente”.
Cuándo Orar en Lenguas
He encontrado cuatro áreas o maneras en que podemos orar en lenguas:
La primera, las lenguas como un lenguaje de oración. Pablo le dice a los Corintios que el oraba en lenguas más que todos ellos, pero que en la iglesia prefería profetizar para edificar la iglesia. Si Pablo oraba tanto en otras lenguas ¿Cuándo lo hacía? La respuesta es evidente: en su tiempo de oración privada. Lo que sucede es que hemos sometido las lenguas a un espectáculo público, en lugar de verlo como un poderoso ministerio de intercesión en el Espíritu. Pablo dice: yo desearía que todos hablen en lenguas. Se nos dice que yo puedo pedirle al Señor dones y el Espíritu decidir a quién darlos. Quien ora en lenguas, ora en el Espíritu. Al punto, que el Apóstol Pablo sabiamente introduce que en mi tiempo de oración personal debo incluir orar en el Espíritu y orar con el entendimiento. No tenemos que caer en la discusión teológica de si el hablar en lenguas es la manifestación visible de ser bautizado en el Espíritu Santo. Es un don disponible para todos los que lo desean, otorgado por el Espíritu a quienes él quiere darlo.
En nuestra congregación, una iglesia en desarrollo. Donde todas los hijos espirituales que Dios me ha dado no tienen nada que ver con la diatriba teológica en la cual yo crecí. En un taller de activación de dones del Espíritu, lograron vivenciar por primera vez 1 Corintios 14. En la mañana oramos, quienes habíamos recibido el don de lenguas, por quienes lo querían recibir y un grupo de hermanos(as) comenzaron a hablar en otras lenguas. Es verdad, no todos lo experimentaron. Pero días o meses después, quienes oraron pidiendo poder hablar en otras lenguas, lo hicieron. Inclusive un joven convertido a Cristo, después de estar 20 años siendo adoctrinado por los Testigos de Jehová. En una pequeña reunión de oración en una de las casas, comenzó a poder orar en el Espíritu. En el taller de activación de dones del Espíritu, en la tarde, pudimos activar el don de interpretación de lenguas, y algunas personas entre jóvenes y adultos podían experimentar que uno a uno pasara a hablar y algunos pudieran interpretar lo que Dios decía. Construimos una carta del Espíritu para la iglesia donde de manera sorprendente todo lo dicho tenía un hilo de coherencia.
En segundo lugar, las lenguas proféticas. Razón de la confusión de algunos de nuestros hermanos en la fe. La lengua profética es activada por el Espíritu en la reunión pública para edificar a la congregación. Por ello el apóstol Pablo en 1 Corintios 14 dice que debe haber quien interprete ese mensaje en otras lenguas. Y hemos experimentado la diferencia entre una y otra. Un día la pastora Lesbia (mi esposa) se disponía a predicar y sintió en su espíritu que debía hablar en lenguas y luego predicó. Al final del culto supimos que una anciana interpretó el mensaje de Dios. Sólo 15 días después le pedimos que lo hiciera público. Nuestros cultos deberían ser como se describe en 1 Corintios 14, unos traen un salmo, uno trae una exhortación, uno trae profecías, otros trae lenguas proféticas con su interpretación; todo debe ser hecho para edificar a la iglesia de Cristo. Es sencillamente volver al molde original. Los Hermanos en Cristo enfatizamos mucho volver al modelo original, volver a lo que enseño Jesús, a las prácticas de la iglesia primitiva. No somos más santos que otros hermanos porque hablamos en Lenguas. Es la sangre de Cristo que nos hace santos, comprados para Dios, hechos hijos de Dios, herederos con Cristo, que reinaremos con él cuando regrese en gloria.
Ahora bien, en la celebración de los cultos a Dios, Pablo recomienda que si no hay intérprete la persona ore para sí. Entonces yo puedo controlar el hablar en lenguas. Nuestras lenguas no son lenguas demoniacas, en las cuales los demonios toman el control de la persona y en estado estático y no consciente comienza a hablar, la iglesia primitiva también conocía eso. Es necesario el poderoso don de discernimiento de Espíritu, porque en la iglesia de Corinto se habían colado personas que no estaban hablando por el Espíritu Santo y estaban maldiciendo a Cristo. En las religiones paganas de la época, la gente era tomada por los demonios en sus sacrificios y comenzaban a hablar en lenguas dadas por los demonios. Es por ello imprescindible, cubrir en oración continúa a la iglesia, para que no entre en sus filas falsos adoradores. Lo mismo sucede con las profecías o con el don de ciencia (conocimiento), pueden ser confundidos con la acción demoniaca de adivinación. Nuevamente, es el don de discernimiento de espíritus que nos dan la luz roja contra las obras de las tinieblas. Pedro en un instante recibió una revelación del Espíritu y declaró que Jesús era el hijo de Dios y acto seguido recibió un pensamiento de los demonios de impedir que Jesús muriera en la cruz. Jesús no reprendió a Pedro, sino a Satanás que le había dado ese pensamiento.
Una tercera manifestación de las lenguas es como señal a los incrédulos. En primera de Corintios 14 Pablo dice que las lenguas es una señal para los incrédulos. Un hermoso ejemplo de las lenguas como señal lo encontramos en Hechos capítulo 2. Fíjate que allí ellos comienzan a hablar en otras lenguas y hablan las lenguas que entendían los presentes en Jerusalén. Ellos podían entender lo dicho, porque les hablaban en las lenguas maternas de los presentes. El mensaje glorificaba a Dios, exaltaba a Dios. Un evento de testimonio evangelístico. A lo largo del tiempo, misioneros han experimentado eso. Los creyentes galileos no conocían esas lenguas, pero el Espíritu Santo les daba hablar, porque son lenguas evangelísticas, son por señal a los incrédulos.
La cuarta manifestación de las lenguas, son gemidos indecibles. Se encuentra en Romanos 8, allí se nos informa que nosotros no sabemos cómo pedir, pero el Espíritu intercede por nosotros con gemidos indecibles conforme a la voluntad de Dios. Son momentos de oración en los cuales nuestra oración es un gemido que es diferente, tiene una carga emocional por una petición, que claramente tu mente no entiende, pero sabes que el Espíritu Santo está pidiendo por algo.
Conclusión
Hermano, el orar en lenguas extrañas o en otras lenguas o con un lenguaje espiritual, es orar misterios a Dios, tu espíritu es edificado según el Apóstol Pablo. No he escrito esto para debatir, sino buscando alcanzar aquellos ministros que como yo han batallado con el pensamiento de permitirle al Espíritu Santo le conceda el hablar en otras lenguas. Dios está levantando un poderoso movimiento de unidad entre las congregaciones de distintas corrientes. Eso es lo que está haciendo en Venezuela, y en los Teques.
La unción que Dios quiere derramar es tan poderosa que no la quiere derramar sobre una persona, un líder, sino en una comunidad de líderes que pertenecen a diferentes corrientes del pensamiento evangélico. No estamos hablando de ecumenismo. Estamos hablando de hombres del Espíritu que tiene a la Biblia como su máxima autoridad.
Es tiempo de acercarnos en respeto todas las congregaciones cristianas evangélicas, sin liderazgo hegemónicos, sino en la comunión de cuerpo. Hermano cada uno de nosotros responderá de sí a Cristo, así que deja el juicio a Dios quien nos juzgará a ti y a mí (según nuestras obras, nuestras intenciones, y según nuestras palabras). Amamos a un mismo Señor: Cristo Jesús. Tenemos un mismo objetivo: traer al reino de Dios a los que han estado cautivos en el reino de las tinieblas, oprimidos por el diablo. Somos un ejército de avanzada, que entramos en territorio enemigo a despojar lo que el Señor Jesucristo conquistó en la cruz del calvario y debemos hacerlo en oración en el Espíritu y acciones evangelísticas.
ARTÍCULOS RELACIONADOS:
0 comentarios:
Publicar un comentario
Apreciamos y agradecemos muchos tus comentarios o sugerencias, por favor déjalos aquí: